13 abril 2009

Hola, tristeza

Llevo muchos días dias sin escribir ninguna entrada por falta de tiempo pero, sobretodo, por melancolía.

No me falta de nada. Tengo un techo con el cubrirme, comida y trabajo suficiente y gente que me quiere....y aún así me falta algo. Por ello me siento egoísta. Pero sufro porque también siento que me falta algo.

Como Yerma. Me siento como Yerma.
No sé si es por cultura o educación(una mujer justifica su existencia al ser madre), o por necesidad, pero quisiera ser madre. Y no lo soy.

¡Ay qué prado de pena!
¡Ay qué puerta cerrada a la hermosura,
que pido un hijo que sufrir y el aire
me ofrece dalias de dormida luna!
Estos dos manantiales que yo tengo
de leche tibia, son en la espesura
de mi carne, dos pulsos de caballo,
que hacen latir la rama de mi angustia.
¡Ay pechos ciegos bajo mi vestido!
¡Ay palomas sin ojos ni blancura!
¡Ay qué dolor de sangre prisionera
me está clavando avispas en la nuca!
Pero tú has de venir, ¡amor!, mi niño,
porque el agua da sal, la tierra fruta,
y nuestro vientre guarda tiernos hijos
como la nube lleva dulce lluvia.

(Yerma, Federico García Lorca)

Y veo un niño y sueño....un sueño ajeno. Y por esto estoy triste.Y por esto me odio. Y por esto me siento triste y sola.....

2 comentarios:

raindrop dijo...

uy! no tengo palabras que te sirvan... lo siento

Pero recibe mis más cariñosos abrazos y mis deseos de que recobres el ánimo :D

Pilar dijo...

Gracias.

Son altibajos que una tiene. Y éste último parece que ya ha pasado.

Pero muchísimas gracias, Rain.